Con la aplicación desde comienzo de año del aumento del impuesto interno, que incrementó el precio de los 0 km hasta el 100%, los autos de alta gama e
Con la aplicación desde comienzo de año del aumento del impuesto interno, que incrementó el precio de los 0 km hasta el 100%, los autos de alta gama en la Argentina se convirtieron en los más caros de la región y los que sufren mayor carga impositiva.
Como consecuencia de este reacomodamiento de los valores, este segmento del mercado registra en febrero una caída de ventas del 80%.
Si se toma como ejemplo un Audi A4, en su versión 1.8 Attraction Multitronic, se puede comprobar la nue-va realidad. Ese modelo, que costaba a finales de 2013 u$s 54.600 en el mercado local, vale hoy u$s 97.000 como consecuencia del impuesto. Este valor supera en un 29% el precio de venta en Uruguay, que es el segundo país de la región que más caro se consigue. Su cotización, del otro lado del Río de la Plata, es de u$s 68.500. En tercer lugar, se ubica Ecuador (un país que tiene al dólar como moneda oficial) mientras que Brasil ocupa el cuarto lugar. En el principal socio del Mercosur, el modelo de Audi vale lo mismo de lo que costaba en la Argentina antes del aumento. México es el país más accesible para comprar un A4 ya que se cotiza en sólo u$s 35.200, poco más que la tercera parte de lo que vale en el mercado local.
Este desfase de precios se debe a que la presión impositiva en este segmento de autos en la Argentina llega a un 68% si se tiene en cuenta el arancel de importación, el impuesto interno, IVA y otros tributos. Esto significa que de los u$s 97.000 que cuesta el modelo, u$s 65.960 son impuestos. Los u$s 31.040 restantes corresponden al valor de fábrica del auto, flete y ganancia de la cadena de comercialización.
El segmento afectado por este impuesto -que incluye las marcas premium, la alta gama de las generalistas, varios modelos de importados y uno de producción nacional – representa alrededor del 8% del mercado. Sin embargo, con los aumentos de precios de todos los 0 km por la devaluación, en los próximos meses comenzarán a estar impactados modelos del segmento mediano fabricados en el país si el Gobierno no sube las franjas a partir de las cuales se aplica el tributo que está establecido en $170.000 y $ 210.000. También corren el riesgo de caer bajo el impuesto muchos de los autos que vienen de Brasil, lo que generaría un conflicto comercial con ese país que es el principal destino de las exportaciones argentinas
FUENTE: AMBITO.COM 18/02/2014