Tras el récord de producción y exportación, la industria automotriz podría caer entre un 10% y 15% este mes. Es que la combinación de conflictos gremi
Tras el récord de producción y exportación, la industria automotriz podría caer entre un 10% y 15% este mes. Es que la combinación de conflictos gremiales que afronta los proveedores, las trabas en la comercialización, la crisis en Brasil (principal comprador externo), hacen que las fábricas radicadas en Argentina prevean una baja para julio y se prendan las luces de alarmas en el segundo tramo del año.
Ford, Fiat, Mercedes Benz, Volkswagen, General Motors, Honda, Iveco, Renault, Scania, PeugeotCitroen y Toyota tienen bastantes frentes abiertos.
Uno de los principales son las consecuencias que parecen tener la situación compleja que viven muchos de sus proveedores. Presionados para nacionalizar piezas, las autopartistas con capacidad de suplir la demanda, ahora deberán surfear los nuevos plazos que impuso la Secretaría de Comercio Interior, dirigida por Guillermo Moreno, para autorizar las Declaraciones Juradas Anticipadas de piezas; que pasaron de 24 horas a 72 y 84 horas, según informó el diario El Cronista.
Esta situación está generando riesgos de parada de planta y suspensiones.
Mientras algunos proveedores discuten con Moreno para poder entrar las piezas, otros lo hacen con el ministro de Trabajo, Carlos Tomada.
Ese es el caso de la alemana Kromberg & Kroschu, un proveedor crítico para marcas como Mercedes Benz y Volkswagen, que desde hace una semana tiene parada la planta por problemas gremiales. Esta semana los trabajadores bloquearon completamente por más de dos horas la Panamericana.
Y, si esto no era suficiente para poner nerviosos a los ejecutivos, el sindicato aduanero arrancó un paro de 48 horas el jueves.
Pero el problema no es solo local. Y lo que más preocupa es lo que sucede en Brasil.
Anfavea, entidad que representa a las automotrices instaladas en el país vecino, confirmó que el sector inició julio con una caída de la producción en función de problemas en el abastecimiento de autopartes causados por la huelga de camionero.
Muchas plantas argentinas funcionan como un pulmón de las brasileñas. Si crece la demanda allá, aumenta la producción local, pero si cae, aquí comienzan las suspensiones.
Ya se empezaron a aplicar suspensiones en los turnos, reconocieron desde una de las marcas que fabrica en el país. Hay plantas en Brasil que pararon, no podemos estar ajenos a eso, agregó. Las vacaciones y paradas técnicas son las herramientas que tienen las fábricas para amortiguar el conflicto de una caída.
FUENTE: IPROFESIONAL.COM 19/07/2013