Tras la ofensiva de todo el Gobierno y en especial de la presidenta Cristina Kirchner, quien generó otra andanada de críticas en la celebración del Dí
Tras la ofensiva de todo el Gobierno y en especial de la presidenta Cristina Kirchner, quien generó otra andanada de críticas en la celebración del Día de la Industria, las empresas habrían acordado con los ministros Axel Kicillof y Débora Giorgi seguir en el Plan hasta fin de año, siempre y cuando se atiendan los problemas individuales de cada una.
Algunas versiones señalan que el Gobierno accedería a cambiar los modelos y en otros casos permitir un aumento de precios, aunque no hay consenso para que se pueda canjear el apoyo por giro de divisas al exterior.
Junto con la ministra Giorgi, estará en las reuniones su secretario de Planeamiento, Horacio Cepeda.
Con cada empresa los funcionarios analizarán su situación particular, su estado de producción, ventas y personal y se verá cómo funcionó el ProCreAuto en su primera versión, que vence el próximo día 24.
El martes pasado, el ministro de Economía acusó a las 11 terminales de extorsionar al Gobierno para conseguir divisas para girarlas a sus casas matrices y dijo que las terminales «bombeaban» el Plan.
En su discurso del miércoles por la noche en Tecnópolis frente a los industriales, la Presidente le reclamó otra vez a las empresas que «vendan autos a los que quieren comprar» y aseguró que la caída del sector obedece a que «las casas matrices de las terminales nos quieren trasladar la crisis a nosotros».
En ese sentido, General Motors (GM) de Brasil suspendió este jueves la exportación a la Argentina de sus tres modelos producidos en ese país, tras la deuda que la empresa ha ido acumulando durante los últimos meses, «debido a las restricciones del país vecino para
liberar dólares para importar».
Según el presidente de GM Sudamérica, Jaime Ardila, «hace un mes que la industria automotriz no consigue obtener moneda americana en el Banco Central de la Argentina».
También en Tecnópolis, el presidente de Fiat, Cristiano Rattazzi, afirmó que «las empresas no encanutan autos», mientras que la titular de General Motors, Isela Constantini, dijo que el ProCreAuto «es un buen plan», pero que a las empresas «le resultaría imposible brindar el financiamiento que les presta el Banco Nación», con tasas de entre 17 y 19 por ciento anual en 60 cuotas.
Fuera de los inconvenientes, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich sostuvo que se percibe un «horizonte muy satisfactorio» para el sector, tras la decisión de Volkswagen Argentina de levantar la suspensión de 800 trabajadores.
Según el funcionario, la empresa «ha planteado la exportación de 90 mil cajas de velocidad (a China)» y anunció que ello «permitiría automáticamente» dejar atrás «la suspensión de aproximadamente 800 trabajadores» de sus plantas, «un horizonte que se presenta como muy satisfactorio» para la industria.
También apuntó que «ya se vendieron 502.000 vehículos» en el presente año y que las proyecciones para 2014 son de 700.000.
En tanto, la Jefa de Estado había asegurado en Tecnópolis que «si no se boicotea el Procreauto» las ventas del sector serían este año similares a las de 2013, a pesar de las caídas registradas en lo que va de 2014.
Según fuentes oficiales, el primer tramo del programa de créditos vence el día 24 y ya lleva recibidas 30 mil solicitudes y 15 mil autos otorgados.
FUENTE: INFOBAE.COM 12/09/2014