El Chery Fulwin II se destaca en la ciudad por su agilidad y su buena respuesta del motor. Presenta un diseño atractivo y mejoras en terminaciones. En
El Chery Fulwin II se destaca en la ciudad por su agilidad y su buena respuesta del motor. Presenta un diseño atractivo y mejoras en terminaciones. En ruta, la dirección y la suspensión no alcanzan su mejor desempeño.
1 – La performance de la marca china Chery en la Argentina ha transitado (y transita) un camino dificultoso. La resistencia a vehículos de ese origen es natural. No es un fenómeno exclusivo de estos lares. Sucede en buena parte del mundo. No se trata de un país con tradición automotriz, y su industria, en general, no viene antecedida de demasiados pergaminos. Por eso, posicionarse en un mercado competitivo como el local no es fácil. Así, su estrategia ha tenido marcados cambios desde se desembarcó. Sólo la Tiggo logró consolidarse. En diciembre lanzó el Fulwin II que llega desde China, aunque en poco tiempo vendrá desde Brasil, con el compromiso de apuntalar a la marca en el mercado local.
2 – Se trata de un restyling del modelo que lanzó en junio de 2013. Por eso, la denominación del Fulwin II no alude a una segunda generación del modelo original. Habrá que esperar para ese cambio al lanzamiento del producido en Brasil.
3 – El diseño exterior presenta pequeños retoques que le dan un aspecto de mayor personalidad por una trompa más lanzada. De hecho, el auto mide siete centímetros más que el original. La versión manejada fue la hatchback , aunque también se ofrece en sedán.
4 – Se percibe en el interior una mejora en la calidad de la terminación y del diseño. El primer Fulwin dejaba bastante que desear en esos aspectos. Hay un intento de superarse, pero todavía está lejos de lo que ofrecen las marcas con historia. Esto es algo que les va a costar revertir a los autos chinos. El volante se regula sólo en altura, lo que limita la posibilidad de lograr la posición de manejo deseada para aquellos que midan por encima del promedio. El espacio de las plazas traseras es reducido. Tres adultos viajarán incómodos si se trata de distancias largas. Hay apoyacabezas para dos. El del medio sólo podrá usar el cinturón. El baúl ofrece una capacidad razonable (la apertura del portón desde el interior es un tanto complicada).
5 – El motor no presenta novedades. Es un 1.5 litro de 16 válvulas con una potencia de 107 CV, acompañado por una caja manual de cinco velocidades.
6 – Por el tipo de vehículo, su ambiente natural es la ciudad. Dos detalles que confirman este razonamiento son la blandura de la dirección y la de la suspensión. Se estaciona con facilidad y neutraliza bien baches y pozos. Sólo hay que tener cuidado cuando se pasa un lomo de burro porque el accionar de los amortiguadores puede producir un golpe nada placentero. Las primeras marchas responden correctamente para moverse con agilidad por calles o avenidas muy transitadas.
7 – Las ventajas de contar con una dirección y una suspensión livianas juegan en contra cuando se sale a la ruta. Se torna inestable y obliga a estar muy concentrado en las curvas o cuando los vientos laterales son marcados. No está pensado para grandes exigencias por lo que el comportamiento en altas velocidades es razonable, lo mismo que la insonorización.
8 – El consumo es reducido y en un punto a favor. Alrededor de siete litros cada 100 km en un uso mixto.
9 – En equipamiento cuenta con dirección asistida, cuatro levantavidrios eléctricos, espejos retrovisores, ABS y doble airbag frontal, entre otros.
10 – Su precio está rozando los $150.000. En un mercado con valores que se dispararon, puede ser otro dato a su favor. Ofrece una garantía de dos años o hasta 60.000 kilómetros.
FUENTE: AMBITO.COM 14/04/2015