El Fiat Qubo es una propuesta atractiva para quienes buscan un vehículo multipropósito. Un andar confortable, un espacio interior amplio y luminoso y
El Fiat Qubo es una propuesta atractiva para quienes buscan un vehículo multipropósito. Un andar confortable, un espacio interior amplio y luminoso y un alto nivel de equipamiento destacan este modelo, que compite en un segmento con tres pesos pesados.
Con la llegada del Fiat Qubo se sumó un nuevo integrante a la batalla en el segmento de los vehículos multipropósito familiares, donde hay tres exponentes que se disputan un público cada vez mayor. Se trata del Renault Kangoo, el Peugeot Partner y el Citroën Berlingo. Se ofrece en dos variantes: Qubo (familiar) y Qubo Fiorino (furgón). La unidad probada corresponde a la versión pensada para la familia.
Presenta un diseño exterior simpático y robusto, con líneas rectas e imagen cúbica que hacen honor a su nombre. Cuenta con puertas traseras corredizas y un amplio portón trasero de apertura vertical que da paso a un generoso baúl.
Como es de esperar en este tipo de vehículos, el interior se muestra espacioso y confortable teniendo en cuenta los parámetros lógicos de un multipropósito y con gran cantidad de espacios portaobjetos. Los asientos son cómodos, especialmente los traseros, y en el caso del conductor la posición de manejo es ligeramente elevada, lo que beneficia en cuanto a la mejora de la visión. El volante cuenta con regulación en profundidad y en altura.
El Qubo viene equipado con un motor 1.4 litro de 73 cv y caja manual de 5 marchas.
En la ciudad, pese a su imagen de robustez, se desplaza con agilidad y no se nota para nada pesado, con una respuesta del motor satisfactoria. La suspensión es equilibrada, ya que se adapta correctamente a las poceadas calles porteñas y se muestra bastante firme a velocidades más altas. La caja de cambios es un tanto imprecisa, por lo que hay que tomarle el pulso para que las marchas pasen correctamente.
En la ruta y a las velocidades permitidas se siente un tanto ruidoso, pero sin llegar a ser molesto. Teniendo en cuenta el tipo de motor, es lógico que haya que darle tiempo para llegar a la velocidad deseada. Además la caja no ofrece una gran amplitud entre marchas, por lo que hay que recurrir a subir o bajar un cambio cuando se hacen variaciones pequeñas en la velocidad de marcha para evitar tironeos.
El Qubo se destaca por su alto equipamiento. En materia de conducción cuenta con computadora de a bordo y el paquete My Way para un manejo más eficiente.
El sistema eco: Drive ayuda a reducir el consumo y las emisiones de gases.
FUENTE: AMBITO.COM 31/01/2012