a Ciudad estudia instalar en el macrocentro porteño un servicio público de alquiler de vehículos, también conocido en el mundo como carsharing. Este
a Ciudad estudia instalar en el macrocentro porteño un servicio público de alquiler de vehículos, también conocido en el mundo como carsharing.
Este sistema, que ya se utiliza en ciudades como Londres, París, San Francisco y Amsterdan, entre otras ciudades, permite a los usuario alquilar un auto por un corto período.
El servicio, que es rentado, habitualmente se utiliza por una hora, y el vehículo se retira y se deja en alguna de las estaciones disponibles en la red, al igual que ocurre hoy con el sistema de alquiler de bicicletas públicas en la Capital.
Así lo admitió el subsecretario de Transporte porteño, Guillermo Dietrich, quien aseguró que avanzan en la elaboración de un plan para instrumentarlo luego de que se inaugure, en 2015, el sistema automático de alquiler de bicicletas.
«Hay una tendencia creciente en muchas ciudades en cuanto al uso del carsharing; en los últimos años, el alquiler de autos eléctricos ganó mucho terreno. Ante los problemas actuales de congestionamiento en el tránsito, venimos estudiando este tema con mucha profundidad y es perfectamente aplicable en una ciudad como Buenos Aires», dijo Dietrich.
Según este proyecto, los autos eléctricos se podrían retirar con una tarjeta o bien con un código de autorización, y el usuario pagará por kilómetro recorrido.
«Son sistemas sofisticados, de forma tal que la persona que alquila uno de estos vehículos hasta podrá reservar un lugar para estacionar en lugares que serán delimitados exclusivamente para estos autos», comentó el funcionario porteño.
En París, por ejemplo, cada auto eléctrico se alquila hoy siete veces por día, y el promedio de tiempo es de 40 minutos. En total, cada auto eléctrico, que son chicos y fáciles para maniobrar y estacionar, recorre unos 250 kilómetros, según fuentes oficiales.
En distintas ciudades del mundo, en general, el costo del alquiler de un auto eléctrico es entre dos y cuatro veces más caro por viaje que un pasaje en transportes tradicionales como el subte o colectivo.
FUENTE: IPROFESIONAL.COM 15/09/2015