El auto eléctrico más impresionante de todos los tiempos ya está en plena fabricación El Rimac Nevera es un hypercar eléctrico de casi 2.000 CV d
El auto eléctrico más impresionante de todos los tiempos ya está en plena fabricación
El Rimac Nevera es un hypercar eléctrico de casi 2.000 CV de potencia, que acelera de 0 a 100 km/h en menos de 2 segundos. Mate Rimac, su creador, contó la historia del modelo, el proceso de validación y el inicio de la producción
Mate Rimac ha revolucionado la industria del auto en muy poco tiempo. Este croata, cuya atrapante historia lo ha llevado a un sitial de preponderancia en muy poco tiempo, es el fabricante del hypercar eléctrico más rápido que se ha construido hasta el momento, el Rimac Nevera. Y este mes de julio ha conseguido, después de varios años de trabajo arduo, rediseño y pruebas, comenzar la entrega de sus joyas a los ansiosos propietarios que pagaron por anticipado nada menos que 2 millones de euros.
El proceso fue muy largo, y haberlo terminado hizo que el propio Mate Rimac haya decidido explicarlo en un video que se ha publicado recientemente.
Es cuatro años y medio, cientos de personas al comienzo y luego miles de ellas, han estado interviniendo en este proyecto”, comenzó diciendo parado frente a una cámara, con varios Rimac Nevera en distinto estado de conservación y presentación a sus espaldas.
“A lo largo de todo este tiempo, se han utilizado muchos Nevera para crash test, road test, y todo tipo de actividades que hacen imposible tenerlos todos juntos, así que 14 de ellos están aquí para contarles cómo ha sido nuestro trabajo hasta llegar al día de inicio de la producción en serie del Nevera”, dijo.
Por qué tantos autos, muchos de ellos semidestruídos o completamente desarmados, llaman la atención de la escena. Rimac lo explica diciendo que “mucha gente cree que para un hypercar que se produce en bajos volúmenes, no se necesitan muchos autos. Solo tienes que construir un par de prototipos y estas listo.”
En realidad no es así. De hecho, los Nevera que se pueden ver en esta presentación, son bastante disímiles entre sí. El primero de ellos es el primer modelo que se construyó, y tenía varias partes móviles con solo pequeños ajustes, por ejemplo de las partes aerodinámicas. Esto era así para poder hacer pruebas en el túnel del viento, con muchas configuraciones simples de modificar incluso dentro de la sala de estudio del aire sobre la carrocería. Ese no era un auto real, sino en realidad una maqueta para estudiar el perfil.
Después vino el primer rolling car, el que podría rodar por las calles y no solo ser estudiado en un túnel de viento o escaneado para simulaciones en CFD. Y pronto dos más, para hacer las primeras pruebas en pista. Lo curioso fue que a medida que se desarrollaba el Nevera, Rimac Automobili crecía como empresa y trasladaba a distintos lugares dentro de Zagreb. Así que el segundo y tercer auto de pruebas, se construyeron en distintas fábricas entre sí y respecto al primero también.
Entre esos tres autos y el cuarto, el Rimac Nevera cambió completamente, precisamente porque los primeros eran prototipos de ensayo que cumplieron la función de generar modificaciones de acuerdo a los resultados que se fueran obteniendo.
Ese fue uno de los autos de validación sobre el cual se harían seis tipos distintos de pruebas de choque, aunque antes de eso, fue preparado para la presentación oficial del vehículo en el Salón de Ginebra de 2020. Esa fue la primera vez que el Nevera se mostró en público, y apenas finalizada la exposición internacional en Suiza, comenzaron los crash test de rigor.
“Lo terminamos dos días antes que se abrieran las puertas en Ginebra, había que dejarlo perfecto para la muestra, y una vez que terminó el evento, comenzamos con varias pruebas de circuito, pruebas de software y finalmente, con los crash test. Así que se puede decir que este auto ha tenido una vida dura”, comenta Mate.
Además se construyeron varios monocascos de fibra de carbono, los cuales fueron sometidos varias veces a diversas pruebas de choque frontal, cada vez más fuertes, luego de las cuales se reparaban y se volvían a chocar a mayor velocidad hasta que el monocasco se rompiera finalmente.
Una vez superadas las pruebas de choque, tanto frontal como lateral y de techo, se construyó el prototipo de validación de durabilidad. Este Nevera fue probado en largas sesiones sobre todo tipo de pisos y condiciones, tanto en circuitos como en rutas, durante decenas de miles de kilómetros, y se sometieron a ensayos de aceleración, de velocidad y de curvas de todo tipo de exigencia.
Hasta ahí llegaron los autos de validación, y entones fue el momento de comenzar con los autos de pre serie. En estos vehículos, los detalles eran ahora lo importante, porque el auto en general ya estaba definido y probado. Los autos de pre serie fueron 5 unidades, y fueron los Nevera más famosos, porque fueron esos que se pudieron ver en test de programas de TV, ensayos de periodistas de medios especializados y eventos de presentación.
“Estos cinco autos se suponía que se destruirían en todas las acciones que se hicieron, pero solo uno se destruyó en verdad y el resto sobrevivió y tenemos muchos planes para ellos en el futuro. Uno de ellos fue incluso sometido a una prueba de conducción de rally para la que no está preparado un hypercar, y salió indemne. El que se destruyó fue el que se sometió a los crash test que se exigen para certificación de seguridad tanto en Europa como en EE.UU., así que se puede decir que fue por una buena causa”, detalla Rimac mostrando el monocasco sano de un auto muy dañado en el resto de sus componentes.
Mientras se termina la nueva fábrica, que será la definitiva donde Rimac producirá sus próximos autos, la primera tanda de Nevera está en pleno proceso de finalización para empezar los envíos a sus dueños, alrededor del mundo.
“Fueron cuatro o cinco años de nuestras vidas. Con ríos interminables de sangre, sudor y lágrimas para nosotros, que tardaron en llegar desde la idea inicial de construir un auto con una performance increíble, que levantara la vara, con mucha gente diciendo que era imposible de lograr, y que quizás cinco o diez años atrás era impensable, que un auto eléctrico deportivo tuviera más velocidad, aceleración y muchos otros aspectos superiores a uno de motor de combustión interna. Y ahora podemos mostrar nuestro nuevo edificio de producción y nuestro primer auto de serie, número 000″, terminó diciendo el creador de este imperio, que además de ser fabricante de sus propios autos eléctricos, es dueño de Bugatti y socio de Porsche.
Simbólicamente, el Rimac Nevera 000 no será para ningún cliente sino que se quedará en la fábrica. Es el primero de 150 que se fabricarán a razón de 50 por año, y que tienen un costo de 2 millones de euros cada uno.
“Es exactamente lo que soñamos cuando comenzó el proyecto. Nos llena de orgullo verlo terminado, y solo espero que para los clientes, tener un Nevera también sea la misma experiencia que es para nosotros fabricarlo”, dice Mate Rimac, mostrando que aún desde un país en el que la industria automotriz no tiene mucha historia, es posible soñar con algo grande y conseguirlo.
FUENTE; INFOBAE.COM.AR 15/07/2022